¡Si a San Juan se lo pides, San Juan te lo da!

Cada 24 de junio, la Iglesia Católica conmemora la Solemnidad de la Natividad de San Juan Bautista, una figura de gran relevancia en la historia de la salvación. Su nacimiento, marcado por eventos extraordinarios, marcó un antes y un después en el camino hacia la redención de la humanidad.

A diferencia de la mayoría de los santos, a quienes se celebra el día de su muerte, la Iglesia dedica una fecha especial al nacimiento de San Juan Bautista. Esto se debe a las gracias únicas y excepcionales que recibió desde el vientre materno.

Santificado desde el vientre

Su santificación se produjo durante el encuentro entre su madre, Isabel, y la Virgen María, ambas embarazadas. En ese momento, Juan experimentó una gracia especial que lo marcó para siempre.

San Juan Bautista, un profeta excepcional, anunció la llegada del Mesías con una cercanía incomparable. Su papel como precursor del Redentor lo convirtió en una figura profética de gran importancia.

Fue un testigo directo,  que tuvo el privilegio de señalar a Jesús entre la multitud, identificándolo como el Mesías esperado.

Un anuncio celestial

El nacimiento de San Juan Bautista estuvo rodeado de eventos milagrosos. El Evangelio de San Lucas relata cómo el ángel Gabriel se le apareció a Zacarías, padre de Juan, para anunciar su nacimiento. Zacarías, debido a su incredulidad, quedó mudo hasta el momento del parto.

Al enterarse del embarazo de su prima Isabel, la Virgen María partió a visitarla para ofrecerle su apoyo y compañía. Durante este encuentro, el niño que gestaba Isabel, Juan Bautista, experimentó un salto de gozo en su vientre al sentir la presencia de Jesús en el útero de María.

Una celebración Cristocéntrica

La fecha del nacimiento de San Juan Bautista, el 24 de junio, coincide con el solsticio de verano, el día más largo del año. Esta coincidencia no es casual, ya que simboliza la luz que Juan trajo al mundo al anunciar la llegada del Mesías.

En contraste, el nacimiento de Jesús, el 25 de diciembre, se celebra durante el solsticio de invierno, el día más corto del año. Esta contraposición representa el crecimiento de la luz después del nacimiento de Juan, hasta alcanzar su máximo esplendor con el nacimiento de Jesús, el “Sol de Justicia”.

La Iglesia Católica reconoce la importancia de San Juan Bautista dedicándole dos días en el calendario cristiano: el 24 de junio por su nacimiento y el 29 de agosto por su martirio.

La fiesta de San Juan Bautista en Venezuela

A San Juan Bautista se le rinde homenaje todos los 24 de junio en los estados Miranda, Vargas, Aragua, Carabobo, Guárico y Yaracuy. Es una de las fechas más esperadas por miles de venezolanos. La fiesta de San Juan es uno de los grandes eventos cristianos que se celebran .

Esta Fiesta en honor al santo patrono San Juan Bautista se celebra en Curiepe y Mamporal, pueblos del eje de Barlovento, en Valles del Tuy, Guarenas y Guatire, del Estado Miranda, Carabobo ,Yaracuy, La Guaira y Caracas, donde los sanjuaneros como así se denominan sus devotos, rinden veneración con sus cánticos y al ritmo de tambores” al santo que todo lo tiene y todo lo da”, como lo expresa un estribillo muy popular de sus canciones.

Los lugareños suelen visitar las playas para encender hogueras y en diferentes localidades, el culto festivo comienza a inicios de mayo, siguiendo un ritual de aparición de San Juan, quien en algunas oportunidades es un niño y en otras un adulto.

El día 24 está dedicado a la fiesta y al bautizo de San Juan en los ríos, en conmemoración al evento bíblico. La oportunidad también es propicia para que los devotos se sumerjan en el agua y así ser bendecidos.